Monday, March 19, 2007

. . : : Trigésima Quinta Nimiedad... del Arte de Renacer : : . .

"El hombre, un poco como el Ave Fénix, nace, resplandece y muere para renacer de sus cenizas, puede tocar fondo, pero de esa caída tomará impulso para resurgir hacia un nuevo esplendor, eso es, el arte de renacer".


Una vez más, estoy de regreso, en esta trigésimo quinta nimiedad, pensando en lo mucho que me dejó este aniversario 27, caray... lo digo con una soltura que me impacta, en otro momento, tal vez me habría negado a aceptar hasta la edad que llegué, pero creo que como buen momento de reflexión, me di cuenta, que es el momento de empezar de nuevo, o sea... nuevas oportunidades, nuevas personas, nuevas sensaciones, el hecho de saber que puedo y quiero atreverme ¿a qué? a lo que sea, simplemente, quiero sentirme viva.

Sé que es bastante curioso que llegue a estas conclusiones, y más aún lo que las ha desencadenado, eso es simple, llevo más de un mes sonriendo, quizá se pregunten que tiene eso de espectacular, yo lo resumo en que no es cualquier sonrisa, no, no lo es; es esa estúpida sonrisa que se niega a irse, que parece llegó para quedarse y que tiene un origen tan poco común como su propia existencia.

Verán, este fin de semana, pude ver el renacer de varias personas y en diferentes formas, creo que la evolución depende de cada uno y del rumbo que vaya tomando y creo que puede encontrarse en las cosas más simples, como darte cuenta de que ya no se seguirá aferrando la mente y el alma a sucesos pasados, o en el hecho de atreverse, aunque sea con un poco de alcohol encima, a comenzar una historia sin saber si será corta o larga, pero por lo menos, no quedarse sin saber que podría pasar.

Muy particularmente, en la propia visión del universo como la mujer que soy, creo que nosotras tenemos muchas formas de renacer, puesto que cambiamos tantas veces en nuestra vida, que a veces sucede demasiado rápido como para poder asimilarlo, sin embargo, eso no nos priva de la posibilidad de resplandecer en cada uno de ellos. El brillo que tiene cada mujer en las diferentes etapas de su vida es muy particular, de entrada, cuando somos niñas, el brillo de la inocencia es algo que siempre nos marca y al ir creciendo, brillamos como las creaturas maravillosas que somos, que vivimos y que somos capaces de sentir y de vivir, con la misma intensidad cada momento, cada hora, cada día y sin perder la capacidad de sorprendernos.

Todo esto no significa que los varones no puedan vivir estas experiencias, creo yo que también son seres altamente luminosos y que ofrecen nuevas expectativas cada día, sobre todo, mientras van haciendo consciente su propia existencia y personalidad, a pesar de todo lo complejos que pueden llegar a ser, me parece que tienen mucho que mostrar y aún mucho más por seguir brillando.

4 comments:

Anonymous said...

muy buena reflexion fer :p me gustó mucho agregada a los favoritos del vampiro slash y comparto tu opinion al respecto =P

Unknown said...

Miba...

Me da gusto, síguete atreviendo y q bueno q dejas al pasado donde debe estar... Atrás

Te quiero

Agersomnia said...

Un gusto leer algo tan bonito, en especial viniendo de alguien que quiero.

He tenido que pensar en muchas cosas yo mismo en estos días; mira que me tomó un día decidirme qué es lo que quería escribir en esta entrada de tu blog.

Creo que a mí también me toca renacer... son muchos los cambios que le tocan a mi cascarón. Voy a prender en llamas algunos barcos tal vez, y cortaré caminos de regreso a algunos lugares... pero será para no dejarme otro camino que crecer.

¡Te quiero coleguita!

Anonymous said...

Yo he regresado al principio de este ciclo, pero tristemente no tengo voluntad de reparar el camino.

Pero me da gusto por ti, desde que te conoci lo senti. Eres una gran mujer